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Segmentos

Les serán una trampa

“Cuando el pueblo de Dios hace pactos con el mundo, el mundo se convierte para ellos en una astilla clavada en los ojos y en una espina en su costado”

La iglesia se encuentra por lo pronto en este mundo caído y caduco con su sistema de valores indiferente o antagónico a Dios, pero no pertenece ya a él, sino al mundo venidero renovado y establecido en su momento por Dios en la tierra en lo que conocemos como “reino de Dios”, a partir de la segunda venida de Cristo. Por eso la iglesia no debe entrar en pactos con el mundo, de la misma manera en que Israel fue advertido para no entrar en pactos con los pueblos paganos e idólatras de sus alrededores y fue amonestado por desobedecer esta instrucción en los siguientes términos: “ustedes, por su parte, no harán ningún pacto con la gente de esta tierra, sino que derribarán sus altares”. ¡Pero me han desobedecido! ¿Por qué han actuado así? Pues quiero que sepan que no expulsaré de la presencia de ustedes a esa gente; ellos les harán la vida imposible y sus dioses les serán una trampa»” (Jueces 2:2-3). Ya en el libro de Números la Biblia se refiere a la manera en que estos pactos y concesiones al paganismo por parte de Israel se convertirían para ellos en astillas clavadas en sus ojos y espinas clavadas en sus costados, a la manera de las espuelas del jinete en el costado del caballo, imágenes muy gráficas que ilustran vívidamente la inconveniencia de estos pactos y la forma en que les causarían problemas y amargarían sus vidas llevándolos a la destrucción. Josué añadió otras imágenes para describir estos pactos, tales como: “red”, “látigos” y “azotes”, que buscaban disuadir a Israel de incurrir en ellos y deberían motivar igualmente a la iglesia de hoy a no hacerlos

Arturo Rojas

Cristiano por la gracia de Dios, ministro del evangelio por convicción y apologista por vocación. Hice estudios en el Instituto Bíblico Integral de Casa Sobre la Roca y me licencié en teología por la Facultad de Estudios Teológicos y Pastorales de la Iglesia Anglicana y de Logos Christian College. Cursé enseguida una maestría en Divinidades y estudios teológicos en Laud Hall Seminary y, posteriormente, fui honrado con un doctorado honorario por Logos Christian College.

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