En la Biblia Dios simplifica las cosas para nosotros al reducir y resumir todas nuestras opciones en la vida a dos solamente. Así, ante Dios todo se reduce a apostar por Él o apostar contra Él. Y eso ya lo vemos cuando nuestros primeros padres decidieron cubrir la vergüenza de su culpa por causa de su pecado –simbolizada en la desnudez física de la que adquirieron vergonzosa conciencia− cubriéndose con delantales de hojas de higuera entretejidos por ellos mismos, los cuales simbolizan a su vez todas las precarias y siempre insuficientes obras que los seres humanos hemos llevado a cabo a lo largo de la historia para tratar de reconciliarnos infructuosamente con Dios en lo que suele designarse como “justificación por obras”. Pero Dios, al expulsarlos del Edén, les ofreció ya una misericordiosa y eficaz alternativa: cambiar sus delantales de hojas de higuera por la ropa de pieles que Dios preparó para ellos: “Dios el Señor hizo ropa de pieles para el hombre y su mujer, y los vistió” (Génesis 3:21). Ropa de pieles que evoca el sacrificio cruento de un animal para proveer su piel como eficaz cobertura propiciatoria para nuestra culpabilidad o desnudez existencial y no propiamente física. Sacrificio que prefigura, tipifica y apunta al sacrificio de Cristo −el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo− por nuestros pecados en la cruz del calvario y que provee para todos los creyentes la cobertura de su justicia perfecta abonada a nuestra cuenta al creer, confiar y rendir nuestras vidas sin reservas a Él en lo que se conoce como la “justificación por la fe”.
Ropa de pieles o delantales de higuera
24 octubre, 2020
2 Lectura mínima
“Al final todo se reduce a cubrirnos con pobres e inútiles hojas de higuera o hacerlo con la eficaz ropa de piel que Dios da”
También te puede interesar
Sobre el autor
Arturo Rojas
Cristiano por la gracia de Dios, ministro del evangelio por convicción y apologista por vocación. Hice estudios en el Instituto Bíblico Integral de Casa Sobre la Roca y me licencié en teología por la Facultad de Estudios Teológicos y Pastorales de la Iglesia Anglicana y de Logos Christian College. Cursé enseguida una maestría en Divinidades y estudios teológicos en Laud Hall Seminary y, posteriormente, fui honrado con un doctorado honorario por Logos Christian College.
Deja tu comentario