Se cuenta que en cierta oportunidad una estudiante que debía presentar el examen más importante y definitivo de su carrera universitaria pidió a su pastor oración por ello, pero le especificó que lo hiciera por favor a las dos de la tarde. El pastor, intrigado por esta petición tan específica y teniendo en cuenta que su examen era a la una y treinta de la tarde le preguntó la razón de esta petición, a lo que ella respondió que quería ver y probar cómo se las arreglaba sin Dios durante la primera media hora. Porque si bien es cierto que debemos reconocer y asumir de forma consciente y planificada todas las variables involucradas en todas las situaciones de nuestras vidas que están bajo nuestro dominio y responsabilidad, como Dios nos manda hacerlo en Su Palabra, la Biblia; para los cristianos este ejercicio siempre debe comenzar y terminar en la oración. La oración no debe ser, pues, un recurso secundario de último momento, sino el primero y principal de ellos, manifestando así la dócil sumisión a Dios de nuestra voluntad en toda circunstancia, como también nuestra final y absoluta dependencia y confianza en Él. No debemos, entonces, poner a prueba a Dios prescindiendo de la oración para ver cómo logramos arreglárnoslas sin Él y su sabia dirección: “Por eso los fieles te invocan en momentos de angustia; caudalosas aguas podrán desbordarse, pero a ellos no los alcanzarán. Tú eres mi refugio; tú me protegerás del peligro y me rodearás con cánticos de liberación. ElSeñordice: «Yo te instruiré, yo te mostraré el camino que debes seguir; yo te daré consejos y velaré por ti” (Salmo 32:6-8)
La prioridad de la oración
“La toma de decisiones correctas pasa siempre por muchas instancias, pero la primera debe ser la oración en todos los casos”
Gloria y Honra a Dios!!!, Y agradecida por a haber tenido la oportunidad de distinguirlo en Iglesia Casa sobre la roca siendo un gran Siervo ejemplar como: pastor, maestro y director de ministerios. Con respeto y admiración, me puedo dirigir directamente y sin tanto protocolo como “Arturo”; recuerdo que la última vez que tuve la oportunidad de hablar personalmente con usted, fue cuando fui a la oficina de unidad educativa a presentar mi hoja de vida. (No salí calificada). Y aún sigo sin trabajo, pero feliz de estar continuando con mis estudios de Facter, ya en 8 semestre. Bendiciones, y muchos éxitos en todo, como se puede estar viendo reflejado.