Afirmaré Tu trono por todas las generaciones

El enfoque premilenialista y dispensacionalista de los últimos tiempos está formado por quienes creen con base en Apocalipsis 20, que el regreso de Cristo establecerá una última dispensación o edad de oro de mil años en la Tierra como un intervalo y abrebocas antes de su glorioso y definitivo reino eterno en todo el universo. En este enfoque se afirma un restablecimiento literal del reinado de David en la Tierra durante este periodo, pero en realidad, la Biblia da a entender que las profecías al respecto ya se comenzaron a cumplir como sucede, por ejemplo, con la profecía de Amos 9:11 que dice: “… »restauraré la casa caída de David. Repararé sus grietas, restauraré sus ruinas y la reconstruiré tal como era en días pasados” de la que Santiago afirma su cumplimiento de este modo en la iglesia: “Con esto concuerdan las palabras de los profetas, tal como está escrito: »‘Después de esto volveré y reedificaré la casa caída de David. Reedificaré sus ruinas, y la restauraré, para que busque al Señor el resto de la humanidad, todas las naciones sobre las que se ha invocado mi nombre” (Hechos 15:15-17). Asimismo, cuando el salmista afirma: “Dijiste: «He hecho un pacto con mi escogido; le he jurado a David mi siervo: ‘Estableceré tu dinastía para siempre  y afirmaré tu trono por todas las generaciones’»” (Salmo 89:3-4) su cumplimiento tiene lugar con la encarnación de Cristo: “… quien según la naturaleza humana era descendiente de David” (Romanos 1:3), pues Cristo sí garantiza en sí mismo y sin lugar a duda que la dinastía de David gobernará para siempre